La Clarín tenía sonido a país.
Cada vez tengo menos ganas de hablar del 2020, pero cuando calculas que todo paso, te enteras que sale del aire La Clarín!!!
La de las horas pares!! La de las horas nones… Radio Clarín dijo? Si amigo, es una radio al principio del dial y de la cultura de este país. Una radio con sonido a lejos siempre, esencia del AM, música de la cuenca de la plata condensada en momentos oportunos a fuerza de buen gusto y tenacidad. Una especie de kiosco musical, donde el canto del pago mostraba y ofertaba un sin fin de chucherías que solo allí estaban.
La Clarín tenía sonido a país, olor a asado o cazuela, tortas fritas y a espuma de mate amargo. Tenía algo que en la campaña era motivo de distinción, «acá llega clarito la clarín». La clarín del ómnibus, de la peluquería y el almacén… Ahhhhh Tristán Narvaja que te quedas soltera o viuda… no sé.
Una radio que invitaba a la rueda del mate, a la prosa cotidiana, te llevaba al último potrero del pago y al almacén del gallego que había a la vuelta. Clarín, te debo mucho del sentir nacional!!! Gracias por aportarle tantos sonidos y dichos a mi idea de identidad. Por esto, hoy de luto y preocupado con los más nuevos, los que no te van a escuchar….
Como les pido que se ericen con el pericón nacional, con el mago, Julio Sosa, Landriscina y tus orquestas?
Llego a pensar que si mi cedula de identidad fuese una radio, en el número del documento diría 580 AM.
«Qué lindo ser oriental»
Santiago Soares de Lima
