Proclama de REDAM.
Proclama 15 de junio 2023
Cada 15 de junio por disposición de ONU para todos los países asociados se conmemora el Día Mundial de Toma de conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez.
Las estadísticas en el mundo dicen que una de cada seis personas mayores sufrió algún tipo de abuso y que esas tasas aumentaron durante la pandemia del Covid 19. Se estima que en 2050 se duplicará la cantidad de personas mayores en el mundo, siendo América Latina y el Caribe la región con mayor proporción de esta población y en la que existe mayor desigualdad.
Uruguay es el segundo país más envejecido de América Latina. Según informó la presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de OEA en reciente visita a nuestro país, los datos sobre personas mayores en Uruguay se encuentran disgregados siendo imprescindible su sistematización para implementar las respectivas políticas públicas.
El maltrato hacia las personas mayores es una violación a los derechos humanos.
Reivindicamos una vez más la necesidad de un enfoque multisectorial, multidisciplinario, con perspectiva de género y sistematizado para enfrentar y reducir este tipo de violación a los derechos humanos.
Es imperioso que los Tratados, Convenciones y Leyes se cumplan efectivamente y no queden en letra muerta. Sabemos que es un tema muy complejo, pero es hora que Inmayores asuma definidamente su papel de órgano rector de las políticas ´públicas en materia de vejez y envejecimiento, articule para erradicar la violencia, protegiendo nuestros derechos. Insistimos en la importancia de realizar campañas de sensibilización sobre edadismo como forma de discriminación y también, reconociendo que los uruguayos somos hijos del rigor y como elemento ejecutivo en el corto plazo, afirmamos la necesidad de la instrumentación y real acción de las unidades de violencia especializada en todo el país.
Para esto el gobierno nacional debe asignar mayores recursos económicos y humanos.
Cambiemos el paradigma asistencialista de la vejez por el paradigma de: los viejos son personas con plenitud de derechos.
La ciencia viene trabajando exitosamente para darnos más años de vida y la aspiración normal de todos es estar muchos años vivos, hagamos que esos años sean propiamente vividos transcurriendo con dignidad y en el ejercicio de los derechos consagrados lejos de abusos y violencia.
El respeto a la vejez y el trato amable están en la base de una sociedad sana, productiva y feliz.