Una historia compartida 81 años
Si se busca con paciencia en Internet, difícil que se encuentre un intercambio entre dos instituciones que lleve más de 80 años.
Centro Unión y el Club Belveder de Montevideo, protagonizan ese hecho que podría perfectamente estar en el libro Guinness de los récords.
En 1938, un grupo de pescadores en su mayoría socios del club capitalino, debió recurrir a un mecánico en la ciudad de Durazno y mientras aguardaban la reparación del vehículo en el que se trasladaban, fueron a acortar la espera y tomar unas copas al Club Centro Unión.
Allí comenzó la historia.
La idea fue hacer una especie de “Cruzadas”, un año de local y al otro como visitante. Con las bochas como el deporte en común, desde entonces, todos los años, es decir desde hace 81, esas visitas mutuas se repiten.
Este fin de semana, los de Belveder vinieron a Durazno y como siempre pasa, los socios de ambos clubes compartieron partidos de “lisas y rayadas”, mesas muy bien servidas y anécdotas por doquier.