La uva y el vino entre, el Carmen y Burdeos.

En pueblo El Carmen, como me gusta seguir llamándole pues evoca mis vacaciones de niño por aquellos lares, a principios de la década de 1920 el francés Andrés Faraut emprendió la cuestión de la viticultura. Tarea que antes ya había comenzado en Manga (Montevideo) y en Carpintería, también en el departamento de Durazno.

El abuelo de estos dos duraznenses, hoy dedicados a procrear la simiente de futuras plantas de vides de uso en la vinicultura con fines comerciales y de exportación, don Pedro Patricio González había sido colaborador de Faraut y a la muerte de éste se trasladó a El Carmen, a la empresa del francés, junto con él también llegó su hijo, Pedro Javier.

Asi, con el paso del tiempo la cuestión del vino se transformó en algo familiar.

Luego de producir vinos por varios años y de fundar una empresa local, Centro Vitis, que tuvo proyección internacional con la producción de una línea de vinos de marca Gobelet, hoy apuestan a la genética de cepas vitisviníferas con la intención del mejoramiento de la producción de uvas y vinos, además de apuntar junto con otro emprendedor francés al mercado externo.

Según la nota publicada en El Observador el pasado sábado, se cuenta que en un principio se comenzó a trabajar con tres tipos de porta-injertos y actualmente tienen siete variedades que pueden adaptarse a diferentes tipos de suelos. “Entre ellos hay 72 variedades de vid y más de 60 clones de viníferas para vino, jugo o vino de mesa”.

En 1979, Pedro González realizó el primer injerto mecanizado en Uruguay.

En 1997, varios productores uruguayos viajaron a Burdeos, Francia, a una feria sobre este tipo de producción agrícola y años después Jean Pierre Bouillac, un viverista francés, viene a Uruguay a invertir y conoce a Pedro.

Bouillac terminará comprando el total del capital de la empresa carmense y manteniendo a González dentro de la misma.

Centro Vitis es hoy un vivero hermano del que Bouillac posee en Francia donde produce plantas de vid que se exportan a países europeos y asiáticos.

Centro Vitis produce hoy 300 mil plantas al año y en el vivero de Burdeos se injertan cuatro millones de plantas de las que se cosecha un 60%.

Pedro González es enólogo y trabaja como asesor del INAVI. Viaja todos los años a Francia al establecimiento de Jean Pierre y Danielle Chambaraud que es viverista, viticultora y propietaria además de las empresas Pepiniers di vieux y Centro Vitis.

Los franceses mencionados a su vez viajan dos o tres veces al año para visitar las sedes de Centro Vitis (Canelones, San José y Villa del Carmen) donde la tecnología y la metodología utilizada es la misma que implementan en Francia.