CATHE

El Charrúa de Oro tiene una historia que nace en 1974 y que de inmediato se transformó en el galardón más importante y más ansiado por los artistas que desfilaban por el escenario del Festival de Durazno.

Llegó a un punto tal que productores de artistas extranjeros llegaban a deslizar a los organizadores, la intención de reducir el costo de actuación si se les daba la estatuilla, propuesta que siempre terminaba directamente con la no contratación del oferente.

Entrega del «Charrúa de Oro» a Víctor y Daniel, en la «Fiesta de la Patria Gaucha».

Vivimos muchas instancias de entregas de la obra de Juan Morra, que hoy lleva su nombre en homenaje a quien falleció tras un infarto sufrido en pleno festival número 30.

En el propio Festival cuando el elegido estaba en la programación del domingo, en la Fiesta de la Patria Gaucha, en el Festival del Mate de San José, en Plaza Rodó, en Presidencia de la República, en Buenos Aires, en el Teatro Español o en el Festival del Rosedal, todas las entregas estuvieron envueltas en la emoción que no necesariamente se trasluce en un rostro o un gesto, sino que se siente en el corazón mismo.

Y la estatuilla adquiere una importancia fundamental cuando llega a las manos de un artista en pleno crecimiento, porque le abre puertas, le suma prestigio y hay muchos ejemplos en tal sentido.

Pero en todos los casos, los cantores manifiestan el agradecimiento a Durazno, su gente y la organización que, al fin y al cabo, es quien los elige para integrar la programación, fundamental para ser candidatos a la premiación.

Muchos en estas horas discuten sobre lo que sintió Catherine Vergnes al recibir el domingo su premio en “El Rosedal”. Basados en una imagen que congela un instante, sacan conclusiones de diversos tipos.

Prefiero creer, porque la hemos visto crecer estos años, lo que sintió realmente en tan ansiado momento. Valorar el galardón, al cual han llegado pocos y recorrer nuevos caminos con él como insignia, es en realidad lo que piensa, aunque no lo supo decir en el momento de la entrega.

Me quedo con la nota realizada pocas horas después por los colegas capitalinos, porque esa es la joven sanducera cantora que valoramos y apreciamos.