Liceo Nº2 «Mtro.Víctor Quiroga»
El Liceo Nº 2 de nuestra ciudad lleva desde este martes 24 de octubre el nombre del Maestro Víctor Quiroga.
Una asistencia numerosa tuvo el acto efectuado por la tarde y la presencia de autoridades de la educación, su hijo Fernando y otros familiares y ex alumnos.
Víctor Alejandro Quiroga Hernández, hijo de inmigrantes españoles, nació en Montevideo el 28 de julio de 1921 y falleció en Durazno el 11 de marzo de 2005. Obtuvo el título de maestro en el año 1944, en 1945 ganó por concurso la plaza en el departamento de Tacuarembó y en 1946 ganó el concurso nacional de dirección. Comenzó su carrera en la Escuela Rural N° 20, pasando a través de diversos concursos de traslados de ayudantías y efectivo a Tacuarembó, Paso de los Toros y Durazno. Al regresar a Durazno, además de actuar como Director de escuelas en el centro de la ciudad, se incorporó al Instituto de Formación Docente que había fundado y dirigía la destacada docente Maestra María Emilia Castellanos de Puchet. Primero ocupó la secretaría del mismo y luego la dirección cuando la fundadora se retiró. Continuó la tarea para lograr la oficialización del mencionado centro lo que se logró en el año 1965, siendo entonces designado como Director por el Consejo Nacional de Enseñanza Primaria. También por su iniciativa el instituto fue nominado «Instituto Magisterial María Emilia Castellanos de Puchet».
En enseñanza secundaria fue profesor suplente de dibujo y matemáticas, profesor precario de primer ciclo de historia y posteriormente profesor efectivo de primero y segundo ciclo, de los que fue destituido por el CONAE durante la dictadura militar. Fue reintegrado en el año 1985, en su cargo de profesor de historia en el Liceo «Dr. Miguel C. Rubino» pasando luego a ocupar la subdirección de dicho instituto, cargo desde el cual se acogió a los beneficios jubilatorios. Impulsó la creación de una comisión específica dedicada a crear un segundo liceo para la capital departamental, antigua aspiración de la población de Durazno. Integró las organizaciones gremiales de maestros de Durazno, asistiendo a congresos y asambleas de la asociación de profesores del liceo. También asistió a la fundación de la Asociación de Institutos Normales del Interior. – 2 –
Participó e impulsó varias publicaciones dedicadas a temas educativos, especialmente destinadas a apoyar la actividad docente en el Instituto Magisterial de Durazno. En 1942 integró la Comisión Editora de la Revista «Siglo XX» para alumnos, de estudiantes magisteriales, publicando algunos trabajos. En 1949 fue encargado de ediciones de Filosofía de la Educación de dicho instituto y desde 1951 a 1955 participó de la redacción de la «Revista del Instituto», compartiendo tareas con docentes como Carlos Scaffo, Jorge Etchenique, Enrique Puchet, entre otros. Desde 1956 a 1958 fue el director de la revista «Temas», también dedicada a temas pedagógicos. Como ensayista a partir de 1943, publicó «Leyendo a Ornar Khayan», «Historia y evolución de la lengua castellana”, «La escuela de la patria», «Una investigación lingüística, acento y tilde», entre otros ensayos. Profundo conocedor de la música popular rioplatense, reunió una importante colección discográfica y se dedicó al estudio de los orígenes y características de esa expresión cultural de Durazno. Comenzó a publicar notas en la prensa local bajo el seudónimo de «Juanitango» para pasar, posteriormente, a editar por varios años la publicación «Cosas de tango», en la que realizó una destacada tarea por la recuperación de la historia de la música típica en la región central del país. Por varios años condujo un programa radial dedicado a ese tipo de música. En el año 1993 fue uno de los principales impulsores de la creación del «Grupo Amigos del Tango», institución dedicada a la recuperación de las tradicionales reuniones bailables de música típica, así como también a promover conferencias, conciertos y otros actos culturales destinados a difundir dicha expresión cultural.
El Profesor Víctor Quiroga brindó en Durazno una serie de conferencias que fueron recopiladas en la publicación «Charlas de Tango» (1999, Durazno), estimuló la llegada a la ciudad de académicos de Montevideo y Buenos Aires para brindar conferencias y recitales sobre la historia del tango. Estas actividades le valieron importantes reconocimientos, siendo incorporado a varias instituciones académicas de Uruguay y Argentina. La propuesta efectuada por la Junta Departamental de Durazno cuenta con el apoyo de la Dirección del centro educativo, Comisión de Denominaciones y Liceos, de la Comunidad Educativa del Liceo y del Consejo de participación, así como con los informes favorables de las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública.
