Tuira Kayapo es una madre y guerrera indígena que mostró al mundo lo que sucede cuando las mujeres toman las riendas de su destino.

El mundo la conoció en 1989 en el encuentro Altamira de Brasil contra la construcción de represas en el río Xingu (Amazonas Brasilero). Apareció en la sala con sus pinturas de guerra, desnuda y con un gran machete. Se acercó al presidente de la compañía eléctrica de Brasil, Petrobras, y puso el filo del machete en su mejilla, y proclamó que su pueblo y toda la Amazonia lo considerarían como un acto terrorista y de guerra.

A continuación indicó: – «Usted es un mentiroso. Nosotros no necesitamos la electricidad. La electricidad no nos va a proporcionar nuestra comida. Necesitamos que nuestros ríos fluyan libremente, pues nuestro futuro y el de toda la humanidad dependen de ello. Necesitamos nuestras selvas intactas para poder recolectar nuestro alimento. No necesitamos su represa!».

Se despidió diciendo:

Mi apellido: ofendida

Mi nombre: humillada

Mi estado: rebelde

Mi edad: la edad de piedra

Se presentó en la sala desnuda, con pintura de guerra y armada con un machete.

Se acercó al presidente de Petrobras – compañía eléctrica brasilera – y, poniéndole la filosa hoja del machete en su mejilla, le dijo que su gente y el Amazonas entero consideraba la construcción de la represa como una declaración de guerra.

Después dijo: “Eres un mentiroso, nosotros no necesitamos electricidad; eso no nos va a dar de comer como lo hace el río. Necesitamos nuestros ríos para fluir con libertad, nuestro futuro depende eso. Necesitamos nuestra selva para cazar y reunirnos. ¡No necesitamos tu represa!”

Tuira Kayapo es la guerrera indígena que el mundo conoció cuando, en la reunión de Altamira- Brasil de 1989, se opuso a la construcción de la represa del río Xingu.