Se quedan sin trabajo
Varios duraznenses perderían su fuente de trabajo si se confirma el anuncio en las últimas horas, del cierre de varias sucursales de Motociclo, entre las que estaría incluída la de nuestra ciudad.
El síndico que asumió la administración de la empresa Motociclo —que solicitó el concurso de acreedores y la liquidación de sus bienes por las deudas que tiene— comunicó ayer al sindicato que más de la mitad del personal será enviado al seguro de paro dentro de un plan para que la compañía continúe abierta hasta que la Justicia decida su futuro.
El dirigente del sindicato del comercio (Fuecys), Fabio Riverón, confirmó ayer a que son más de 150 las personas que irán al seguro de un total de 274 empleados con que contaba Motociclo.
El miércoles el síndico a cargo, Gabriel Ferreira (de la Asociación Uruguaya de Peritos), había informado a El País que desde octubre Motociclo «va a cerrar unos cuantos locales» y continuará trabajando «con unos ocho» puntos de venta, cuando tiene en total 23 en todo el país. También explicó que «por el momento» no habrá despidos, sino que se pretende «dejar una estructura menor y analizar la continuidad de los trabajadores los meses posteriores».
Ayer hubo una asamblea en Fuecys donde se informó de la situación a los empleados, al tiempo que aguardaban para la noche el envío por parte del síndico de un plan detallado con las acciones que impulsará en estos meses a cargo de la compañía.
Ferreira cuenta con 90 días para valuar los activos de Motociclo y sugerirle al juez que entiende en el caso la mejor forma de venta (en bloque o por partes), pero mientras la empresa mantendrá su actividad.
Si bien los trabajadores tienen prioridad para cobrar dentro del proceso judicial, la preocupación del sindicato es que la mayoría de los locales de Motociclo están embargados al ser garantía de los préstamos bancarios que adeuda.
Fuecys calcula en US$ 3 millones el monto de las indemnizaciones por despido, y pretende que el síndico otorgue «una garantía» de cobro. Ferreira dijo que hay «un stock de mercadería que permitiría» cubrir ese dinero con las ventas en los locales que continúen abiertos.
Fuecys venía advirtiendo desde hace tiempo sobre la difícil realidad de la compañía debido a atrasos salariales —aunque al día de hoy no hay deudas de este tipo—, emisión de cheques sin fondo que afectaron su relación con proveedores, y el cierre de tres sucursales en el interior del país y otra en Punta Carretas.
Fue así que se llegó hasta fines de agosto, cuando Motociclo solicitó el concurso de acreedores, que la Justicia rechazó en dos oportunidades.