Por Jesús Carlos Correa

No hay duda que Durazno es un pueblo maravilloso, hermoso, generoso. No hay pago como mi pago.

Esta tierra que nos vio nacer nos ha dado mucho más de lo que nosotros le hemos devuelto. Tierra generosa con propios y extraños, con quienes aquí nacimos como con aquellos que la adoptaron por circunstancias diversas, para cobijarse bajo su cielo.

Desde aquel 12 de octubre de 1821, han pasado por este pueblo, innumerables historias, personas y personajes, que han enriquecido tanto su historia y sus costumbres como su cultura. Año a año, desde aquel lejano día, nos encontramos con noticias de uno o varios duraznenses que se han destacado en algo o han logrado una nueva meta o un nuevo objetivo. El siempre mencionado orgullo duraznense, va desde un pequeño deportista que recién se inicia en lo suyo, pasando por los alumnos de las escuelas que cada tanto nos sorprenden con alguna actitud solidaria y en equipo, hasta los que se van de la ciudad para continuar con sus vidas y un buen día vuelve un médico, un ingeniero, un profesor, un arquitecto, un dentista, un contador…

Por eso es oportuno es oportuno renovar el compromiso de cuidar y valorar la bendición de vivir en un lugar tan privilegiado como Durazno.

La unidad de un pueblo permite su fortalecimiento y su crecimiento como comunidad. Por ello llegue  un caluroso saludo a todos sus habitantes, y los animo a trabajar por el desarrollo permanente, para lograr codo a codo y entre todos una sociedad madura, que se desempeñe con libertad de pensamiento, atendiendo las necesidades de sus ciudadanos.

Es oportuno renovar el compromiso de cuidar y valorar la bendición de vivir en un lugar tan privilegiado como este.

En este nuevo  Aniversario de la Fundación de la ciudad, saludamos a todos los duraznenses que día a día hacen que este lugar  se siga destacando por su pujanza y solidaridad.

Feliz cumpleaños a toda la gente que tiene el orgullo de haber nacido aquí, vivan donde vivan, estén donde estén!