El precio del asado bajó entre 30 y 50 pesos por kilo según el corte o la calidad. Desde la Unión de Carniceros se asegura que el precio se trasladó rápidamente al público.

“Después de las fiestas el precio del asado bajó tres veces” explicó Hebert Falero, de la Unión de Carniceros.

La disminución del precio del asado es notoria, en algunos casos cuesta en el entorno de 260 pesos por kilo cuando llegó a estar incluso 340. Falero aseguró que todavía “la gente tiene miedo y estamos a fin de mes” y por eso todavía no aumentó la venta de carne.

La baja en las exportaciones de carne a China parece ser el termómetro regulador del precio en el mercado interno.

Las carnicerías no han notado aún mayor movimiento por la reducción del precio del asado, en muchos casos se cree que el público no se ha percatado aún de la noticia.