La historia del maíz en Uruguay y las variedades de la región: investigadora de UTEC participó de trabajo que reunió esta evidencia de Latinoamérica.
En Uruguay hay 10 razas de maíz, y un patrimonio genético y cultural en las manos de los productores y productoras familiares. Hay 80 variedades criollas relevadas en Rocha, Treinta y Tres, Tacuarembó y Rivera.
El maíz ha sido el alimento básico no solo de los pueblos andinos, desde sus orígenes, sino también de los pueblos de la Amazonia hasta la Pampa brasileña y uruguaya. Un equipo de 40 investigadores Latinoamericanos entre los que se encuentra Natália de Almeida, investigadora de UTEC, publicaron un libro que resume información sobre el maíz en América nunca antes reunida. Luego de un camino de cuatro años de conocer, preguntar y analizar llegó el resultado de tanto trabajo. Maíces de las Tierras Bajas de América del Sur y Conservación de la Agrobiodiversidad en Brasil y Uruguay, así se titula el libro que está disponible en español y portugués. La publicación presenta los resultados de cuatro años de trabajo visitando productores y productoras familiares, comunidades indígenas y tradicionales, entrevistándolos, conociendo variedades criollas y estudiándolas. Esta publicación elaborada por investigadores principalmente de Uruguay y Brasil permite conocer la historia del maíz y cómo se dispersó desde la Amazonia hasta llegar a Uruguay.
Responde preguntas tan generales como ¿por qué los humanos domesticaron el maíz? y también aborda las razas de maíz en las Américas, la diversidad genética en el Conosur, las razas de maíz en las tierras bajas de América del Sur que incluyen a Uruguay y la clasificación de las razas en Brasil y Uruguay, entre otros aspectos. En Uruguay hay 10 razas de maíz y fueron relevadas cerca de 80 variedades criollas de Canelones, Rocha, Treinta y Tres, Tacuarembó y Rivera. “Este tipo de relevamiento pone en evidencia la diversidad de Uruguay y el trabajo de productores y productores familiares en la conservación de las variedades criollas. A su vez, las variedades criollas aportan a la preservación del medio ambiente, pues son manejadas en sistemas de base agroecológica, aportan a la salud de las personas y del agroecosistema y representan un patrimonio genético y cultural para Uruguay”, destacó de Almeida. “Quisimos mostrar las diferentes experiencias y contextos en los que las variedades criollas de maíz se desarrollan y crecen en Latinoamérica. Las variedades criollas no existen sin los agricultores y agricultoras”, por eso este trabajo es resultado de un gran grupo de colaboradores de la Red de InteABio, participando de los talleres, invitando agricultores o trasladando espigas para ser analizadas, entre otras tareas, contó Natália de Almeida, profesora Asociada en el Área de Sistemas Forestales de Ingeniería Agroambiental de UTEC.
De Almeida, ingeniera agrónoma y doctora en Recursos Genéticos Vegetales, es miembro fundadora de la red de investigación colaborativa entre Brasil y Uruguay que llamada InterABio (Grupo Interdisciplinario de Estudios en Agrobiodiversidad). De este trabajo también participó un grupo de investigadores de la Universidad de Sao Paulo (Brasil) y de Uruguay, la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República (Udelar) quien coordinó el proyecto en Uruguay, la Red de Semillas Criollas y Nativas de Uruguay, el Centro Universitario Regional Este Udelar, BioUruguay, y la Sociedad de Fomento Rural de Tala.
¿La agrobiodiversidad y el maíz?
La agrobiodiversidad es la rama de la biodiversidad que estudia todas las variedades de cultivo y sus agroecosistemas y los saberes y conocimientos asociados Esta publicación aporta conceptos renovados sobre las razas de maíz. El foco está puesto en la agrobiodiversidad, es decir, en la amplia variedad de maíces que existen en la región. Cuenta con información sobre las razas de maíz, presenta la conservación en los sistemas agrícolas tradicionales y experiencia de conservación, uso y manejo de agrobiodivesidad en los territorios, que van incluso más allá del maíz. El trabajo contó con la financiación de instituciones públicas (Comisión Sectorial de Investigación Científica de la Udelar en Uruguay, la Fundación de Apoyo a la Investigación del Estado de San Pablo, Fapesp, y el Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, conocido como CNPq en Brasil).
Para acceder a la publicación: https://www.atenaeditora.com.br/post-ebook/3743 El grupo de investigación en agroecología de UTEC Desde la carrera Ingeniería Agroambiental de UTEC que se dicta en Durazno, de Almeida impulsó junto a otros colegas el Grupo de Agroecología, Sustentabilidad y Medio Ambiente (GASMA) de UTEC. Desde el GASMA el objetivo es fortalecer las líneas de investigación en conservación de recursos fitogenéticos, agroecología y manejo de la agrobiodiversidad y la etnobotánica (que estudia la relación entre los seres humanos y los vegetales). “Estas líneas pueden aportar a los lineamientos estratégicos de UTEC que está consolidando en investigación”, dijo de Almeida. Entre los objetivos de trabajo por venir está también ampliar las redes de trabajo con otras universidades e instituciones y organizaciones en el territorio. “El proyecto abre oportunidades y genera nuevas preguntas de investigación, por ejemplo, cuál es la calidad nutricional de las variedades criollas de maíz de Uruguay, o cuál es la biodiversidad asociada a la diversidad de maíz. Son temas que estamos planteando para seguir estudiando en colaboración con otros investigadores tanto de UTEC como de la Red InterABio”, destacó de Almeida