La noticia nos llegó de pronto esta tarde y se clavó como un puñal directo al corazón, porque toda muerte es dolorosa pero cuando es un colega el que se va para siempre, se sufre, se siente inmensamente.

Ha fallecido Pablo Llanes.

Cuantos momentos compartidos en sus primeros tiempos de relator de fútbol, cuantas charlas y anécdotas en los últimos cuando hacía todo lo posible por mantenerse en su pasión, la de estar tras un micrófono y vibrar en una jugada, en un driblin y en el gol que hace explotar la garganta a todo aquel que fue elegido para trasmitir a los demás, lo que se ve en una cancha.

El Periodismo de Durazno se enlutece al callar una voz que le representaba fielmente.

A su linda familia, a sus compañeros de Radio Durazno, nuestro más sincero pésame.

“Uno debe morir con orgullo cuando ya no es posible vivir con orgullo”. Friedrich Nietzsche